El sarro surge de la mineralización de la placa bacteriana. La placa está compuesta por la mezcla de saliva, restos de comida y conjuntos de bacterias que se alimentan de estos restos de comida. Estas bacterias son las responsables de las caries y las enfermedades periodontales.
Según Felipe Pereda, odontólogo de Centro Dental Pereda, “el sarro puede conllevar la aparición de caries, problemas como la gingivitis, la periodontitis y las recesiones de encía, halitosis y mal aliento, además de un aspecto fuertemente antiestético”.
Una de las formas para reducir la formación de sarro en los dientes es mediante un correcto cepillado de los mismos, especialmente con una pasta de dientes especialmente preparada para el control del sarro. Asimismo, podemos prevenir la aparición del sarro usando hilo dental. Pero una vez que el sarro se ha concentrado en los dientes son los dentistas quienes deben proceder a la limpieza bucodental.
¿Cómo prevenir el sarro en los dientes?
Pues es tan sencillo como cuidar la alimentación. Hay una serie de alimentos que te pueden ayudar a disminuir la presencia del sarro en los dientes. En primer lugar, ingerir una manzana o una raja de melón después de comer te favorece de manera natural a limpiar los dientes y, como consecuencia, evitará la aparición de esta sustancia en la superficie de los dientes. Por otra parte, la vitamina C de las naranjas también evita la formación de estos microorganismos.
También son ricos en vitamina C los tomates y las fresas. Te aconsejamos que cortes estas frutas y verduras, y los frotes en la superficie de los dientes para evitar la aparición de sarro y espera unos minutos antes de beber o comer. Incluye también alimentos abundantes en calcio como el queso, el yogur o las almendras. Además, masticar vegetales crudos como zanahorias o pepinos obstaculizan la acumulación de sarro en los dientes.
Las pasas es otro de los comestibles para esquivar la aparición de sarro, y es debido a que este fruto seco no contiene sacarosa ni azúcar de mensa. Asimismo, la leche, si se toma después de comer cereales azucarados baja los niveles de ácido en la boca, incluso más que beber agua o zumo de manzana.
Por otro lado, uno de los remedios caseros más antiguos que existen para la eliminación de este microorganismo es el bicarbonato de sodio. Te recomendamos que deposites una cantidad pequeña en un vaso, mojes tu cepillo y luego las cerdas en el bicarbonato, y te los cepilles como de costumbre.
En Centro Dental Pereda, tu dentista en Toledo, contamos con las técnicas adecuadas para retirar el sarro de tus dientes. Contamos con grandes profesionales que te aconsejarán qué tipo de cepillos es el más idóneo para la limpieza de tus dientes. ¡Visítanos!